A partir del tercer álbum de la serie, deja de haber referencias al diario en que colabora Tintín, aunque el personaje no deja de presentarse como reportero, y utiliza en ocasiones su profesión como medio de hacer averiguaciones en sus aventuras. En los álbumes no se dan nunca indicaciones sobre la edad de Tintín, ni sobre sus circunstancias familiares, afectivas o sexuales, destacando por su inquebrantable honradez, a la que no es ajena la admiración de Hergé por el movimiento scout.